El estrés laboral es una de las mayores causas de baja y de los problemas de salud en el trabajo en la actualidad. Los cambios en la estructura laboral de los últimos años han terminado haciendo mella en la población activa, que se ve presionada constantemente por las necesidades de las empresas, las crisis económicas, el miedo a perder el empleo y la excesiva carga de trabajo y responsabilidades.
Según aseguran los expertos, el trabajo, la principal fuente de preocupación y tensión entre la mayoría de las personas, no debería mermar nuestra salud bajo ninguna circunstancia, por lo que se convierte en algo básico evitar el estrés laboral y aprender a relajarse. Para conseguirlo, es necesario seguir una serie de consejos sencillos que nos harán ganar en calidad de vida e incluso rendir más en la oficina:
• Planifica tus actividades. No dejar lugar a la improvisación ni a la acumulación de tareas nos hará sentirnos mucho más relajados en la oficina. Acumular trabajo, y por tanto sentirse desbordado, es la primera causa de la ansiedad, los nervios y el estrés.
• No acumules más responsabilidad de la que tu empleo requiere. Es fundamental que aprendas a conocer tus límites y no abarques más de lo que tu organismo puede sostener. Del mismo modo, resulta fundamental aprender a decir `no´ ante los abusos de trabajo que en ocasiones puedan producirse.
• Duerme lo suficiente para estar descansado. No dormir las horas necesarias o carecer de un sueño reparador conseguirá que no rindas en el trabajo y que no puedas afrontar al 100% la jornada laboral. Si no consigues dormir acude a tu médico para explicarle tu problema o busca un psicólogo que pueda ayudarte en los anuncios y clasificados de las páginas especializadas.
• Realiza ejercicio. Nada descarga más tensiones y ayuda a desconectar como el deporte. Acude al gimnasio, realiza yoga o sal a correr para volver a sentirte en forma y con energías renovadas.
• Mímate en un spa. Comprar un tratamiento de belleza o un bono de masajes te ayudará a descargar el estrés y a gozar de un momento de calma inigualable.
Además de esto, mientras estés en el trabajo y cuando sientas que el estrés y la ansiedad se apoderan de ti, siempre resulta conveniente realizar unos sencillos ejercicios que no te ocuparán más de un minuto de tiempo, y que en cambio, te ayudarán a afrontar el resto de la jornada de trabajo:
• Relaja el cuello y la nuca. Rota suavemente la cabeza en forma de círculos hacia un lado y hacia el otro. Mueve la cabeza en movimientos de afirmación y negación y hacia un lado y otro, apoyándola alternativamente en cada uno de tus hombros.
• Calma tus hombros. Con un movimiento rotatorio muévelos alternativamente, para finalizar subiendo y bajando ambos al mismo tiempo como si estuvieses confuso.
• Activa brazos y espalda. Entrelaza los dedos de las manos entre sí, extendiendo los brazos hacia adelante, girando las palmas y empujando, de cara a movilizar toda esta zona.
• Relaja las manos y las piernas. Para quitar el estrés de las manos rota tus muñecas y luego sacúdelas como si estuvieses salpicando a alguien. Para las piernas rota los tobillos y estira los pies, como si te pusieses de puntillas imaginariamente.
Por último, es importante que recuerdes tomarte cada día 20 minutos para ti una vez que llegues a casa. Prepara un té y desconecta durante ese tiempo ignorando el ordenador y el teléfono. Un sencillo gesto para sentirse más a gusto con uno mismo y ganar en relajación y calidad de vida.